Juani Pérez Coronado, consejera de la cooperativa Nuestra Señora de la Antigua y Santo Tomás de Villanueva, de Villanueva de los Infantes (Ciudad Real). Gestiona junto a su marido una explotación agrícola en Torre de Juan Abad.
A Juani Pérez el “gusanillo” agrícola le llegó cuando se casó, ya que su marido y sus suegros se dedicaban a ello; actualmente tiene junto a su marido una explotación de cereal, viñedo y olivar, “yo siempre estoy en las viñas y ayudo en todo lo que está en mi mano”.
Juani es el ejemplo de que las jornadas y cursos realizados por Cooperativas Agro-alimentarias para dar mayor visibilidad a las mujeres en el sector dan sus frutos, ya que ella asistió a una de estas iniciativas hace tres años en la cooperativa Nuestra Señora de la Antigua y Santo Tomás de Villanueva, de Villanueva de los Infantes y desde entonces empezó a llamarle la atención formar parte de este sector, “yo no tenía ni idea pero me gustaba; me animé a raíz de las jornadas y en las elecciones salí elegida. Puedo decir que ha sido muy buena experiencia, he aprendido muchísimo, me han ayudado siempre y puedo decir orgullosa que, dos años después, hubo elecciones y fui la segunda más votada”.
Cooperativas Agro-alimentarias C-LM: ¿Por qué apostar por el modelo cooperativo?
Juani Pérez: Fundamentalmente por el tema de intereses y ventas; no es lo mismo venderlo tú solo a un comprador que venderlo con la fuerza de una cooperativa, que puedes mover el producto de otra manera.
CACLM: ¿Hacia dónde tiene que ir el modelo cooperativo?
J.P.: Una cosa que yo cambiaría es el estancamiento del agricultor a la hora de tomar la iniciativa en otras variedades; sólo se trabajan que más producción dan, cuando tal vez haya que poner el punto de mira en otras, que aunque den menos vino producen mejores caldos.
El agricultor se ha quedado muy estancado en kilos y viñedo y muchas veces hay que apostar por la calidad y salirse de las normas de siempre. Es necesario arriesgarse e internar superarse.
CACLM: ¿Qué pueden hacer las cooperativas para integrar el talento de la mujer?
J.P.: Las cooperativas están haciendo mucho; hay muchas jornadas y mucha información. Pero muchas veces el problema es la propia mujer, que no se atreve, no da el paso, y por muchas jornadas que se hagan al respecto, si no somos nosotras mismas las que nos animemos, no haremos nada. Hay falta de confianza.
La mujer, sobre todo en el medio rural y en los pueblecitos no sólo muchas veces no se atreve, sino que también son los propios hombres los que consideran que es un mundo solo para ellos. Es un sector duro.
CACLM: ¿Por qué apostar por la mujer en la cooperativa?
J.P.: Cuando estoy en el Consejo de la cooperativa muchos hombres lo dicen, que tal vez puedo aportar otras cosas, algo distinto, otra visión. Estoy muy contenta porque me siento respetada y está claro que aporto otro punto de vista muy diferente.
CACLM: ¿Qué mensaje darías a otras mujeres que quieren dar el paso de formar parte del sector?
J.P.: Les diría que lo hagan, que seguramente van a recibir mucho apoyo; que hay muchas cosas que quizá desconozcan del sector pero que, para eso, hay gente a tu alrededor dispuesta a ayudarte, a apoyarte, que te va a dar todas las explicaciones que necesites. Ante todo hay que tener la decisión de querer hacerlo, de querer estar, de ser valientes.